La salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psicológico y social. Afecta la forma en que pensamos, sentimos y actuamos cuando enfrentamos la vida. También ayuda a determinar cómo manejamos el estrés, nos relacionamos con los demás y tomamos decisiones. La salud mental es importante en todas las etapas de la vida, desde la niñez y la adolescencia hasta la adultez y la vejez.
Las enfermedades mentales son afecciones graves que pueden afectar la manera de pensar, su humor y su comportamiento. Pueden ser ocasionales o de larga duración. Pueden afectar su capacidad de relacionarse con los demás y funcionar cada día. Los problemas mentales son comunes, más de la mitad de todos los estadounidenses serán diagnosticados con un trastorno mental en algún momento de su vida. Sin embargo, hay tratamientos disponibles. Las personas con trastornos de salud mental pueden mejorar y muchas de ellas se recuperan por completo.
La salud mental es importante porque puede ayudarle a:
Enfrentar el estrés de la vida
Estar físicamente saludable
Tener relaciones sanas
Contribuir en forma significativa a su comunidad
Trabajar productivamente
Alcanzar su completo potencial
Su salud mental también es importante porque puede afectar su salud física. Por ejemplo, los trastornos mentales pueden aumentar su riesgo de problemas de salud física, como accidente cerebrovascular, diabetes tipo 2 y enfermedades cardíacas.
Hay muchos factores diferentes que pueden afectar su salud mental, incluyendo:
Factores biológicos, como los genes o la química del cerebro
Experiencias de vida, como trauma o abuso
Antecedentes familiares de problemas de salud mental
Su estilo de vida, como la dieta, actividad física y consumo de sustancias
También puede modificar su salud mental tomando medidas para mejorarla, como hacer meditación, usar técnicas de relajación y ser agradecido.
Con el tiempo, su salud mental puede cambiar. Por ejemplo, puede estar enfrentando una situación difícil, como tratar de controlar una enfermedad crónica, cuidar a un pariente enfermo o tener problemas de dinero. La situación puede agotarle y abrumar su capacidad de lidiar con ella. Esto puede empeorar su salud mental. Por otro lado, recibir terapia puede mejorarla.
Cuando se trata de sus emociones, puede ser difícil saber qué es normal y qué no. Pero los problema de salud mental tienen signos de advertencia, como:
Cambios en sus hábitos alimenticios o de sueño
Aislarse de las personas y actividades que disfruta
Tener nada o poca energía
Sentirse vacío o como si nada importara
Tener dolores y molestias inexplicables
Sentirse impotente o sin esperanza
Fumar, beber o usar drogas más de lo habitual
Sentirse inusualmente confundido, olvidadizo, enojado, molesto, preocupado o asustado
Tener cambios de humor severos que causen problemas en sus relaciones
Tener pensamientos y recuerdos que no puede sacar de su cabeza
Escuchar voces o creer cosas que no son ciertas
Pensar en lastimarse a sí mismo o a otros
No poder realizar tareas diarias como cuidar a sus hijos o ir al trabajo o la escuela
Si cree que puede tener un problema de salud mental, busque ayuda. La terapia de conversación y / o los medicamentos pueden tratar los trastornos mentales. Si no sabe por dónde comenzar, hable con su profesional de la salud.
Existen muchos tipos diferentes de trastornos mentales. Algunos comunes incluyen:
Trastornos de ansiedad, incluyendo trastorno de pánico, trastorno obsesivo-compulsivo y fobias
Depresión, trastorno bipolar y otros trastornos del estado de ánimo
Trastornos psicóticos, incluyendo la esquizofrenia
No hay una sola causa de la enfermedad mental. Varios factores pueden contribuir al riesgo de sufrirla, por ejemplo:
Sus genes y su historia familiar
Su experiencia de vida, como el estrés o si ha sufrido de abuso, en especial durante la infancia
Factores biológicos como desequilibrios químicos en el cerebro
La exposición de una madre a algún virus o productos químicos durante el embarazo
Tener una enfermedad seria como el cáncer
Tener pocos amigos y sentirse solo o aislado
Los trastornos mentales no son causados por falta de carácter. No tienen nada que ver con ser flojo o débil.
Los trastornos mentales son comunes. Más de la mitad de todos los estadounidenses serán diagnosticados con algún trastorno mental en algún momento de su vida.
Los pasos para obtener un diagnóstico incluyen:
Su historia clínica
Un examen físico y posiblemente pruebas de laboratorio, si su proveedor de salud piensa que otras afecciones médicas podrían estar causando sus síntomas
Una evaluación psicológica , en la cual responderá preguntas sobre sus pensamientos, sentimientos y conducta
El tratamiento depende del trastorno mental que usted tenga y qué tan grave sea. Junto a su proveedor trabajarán en un plan de tratamiento solo para usted. Por lo general, implica algún tipo de terapia. También puede tomar medicamentos. Algunas personas también necesitan apoyo social y educación para manejar su afección.
En algunos casos, es posible que necesite un tratamiento más intensivo. Si su enfermedad mental es grave o tiene riesgo de hacerse daño a usted o a alguien más, es posible que deba ir a un hospital psiquiátrico. En el hospital, recibirá consejería, discusiones grupales y actividades con profesionales de salud mental y otros pacientes.